Esta ruta no necesita permisos para su realización no obstante, en determinados días con actuaciones cinegéticas (como por ejemplo de caza selectiva) el sendero puede permanecer cerrado temporalmente para garantizar la seguridad de los visitantes, por lo que le recomendamos se informe previamente de esta circunstancia llamando a la oficina del parque natural en Alcalá de los Gazules, teléfono 856 587 508 (horario de atención: lunes a viernes de 9:00 a 14:00 horas, excepto festivos).
Ruta circular situada en el Parque Natural de Los Alcornocales en la finca «El Palancar», que linda con el embalse de Charco Redondo y que discurre por parte de los «Montes de Propio». En este sendero encontraremos zonas de alcornocal, quejigal, pinares, bujeos y herrizas, además de otros elementos como tumbas antropomórficas, casas cuevas y una reserva de Borricos Andaluces.
Tras pasar la cancela que da acceso al sendero, comprobamos el carácter didáctico del mismo, un primer panel acerca de los bujeos, seguidamente otro sobre las aves y poco más adelante uno sobre el quejigal. Llegamos a una fuente rodeada de pasarelas de madera bajo un tajo de arenisca. Se trata de una fuente de aguas ferruginosas, con su característico color anaranjado debido al hierro disuelto en ella. Aquí también podemos contemplar una de las nueve tumbas antropomorfas que se han hallado en los alrededores, tumbas talladas en la roca de arenisca. Este tipo de enterramiento es bastante común en la zona y podemos encontrar miles en el área del Parque Natural Los Alcornocales y su entorno. Un ramal del carril hacia la izquierda nos lleva a una zona de descanso, con bancos de madera y otra fuente de iguales características a la anterior. Es un bonito rincón donde disfrutar de la naturaleza.
El sendero asciende hasta un pinar de repoblación donde se encuentra instalado un cerramiento de borricos, animales considerados fundamentales para la supervivencia en el monte hasta hace sólo unos años. El rico matorral mediterráneo acompaña hasta unas casas cueva, habitadas hasta principios de los 70. De vuelta al carril principal y tras caminar unos metros, podemos desviarnos momentáneamente a la izquierda para visitar unos chozos llamados moriscos. Estas construcciones eran las casas típicas de la zona,
construidas con materiales del entorno. Las paredes son de piedra y el techo de brezo. Estos moriscos están emplazados en un bonito quejigal y un panel interpretativo nos da detalles acerca de este ecosistema. También podemos ver los restos de un horno de carbón o alfanje. Volvemos sobre nuestros pasos y continuamos por el carril principal.
Pronto nos encontramos con las Cuevas del Palancar, el lugar tiene algo de magia rodeado de alcornoques, extendiendo la vista hasta lo más profundo del bosque, después de visitar el entorno continuamos por la pista hasta un magnifico mirador natural de rocas areniscas, formaciones típicas de este Parque, nos permite ver en todo su esplendor la aguas del embalse, las alomadas caídas de la Sierra de Montecoche, y la Sierra del Junquillo, resultando un agradable y bellísimo entorno paisajístico. Este puede ser un buen lugar para parar a tomar un tentempié. Continuamos por la pista hasta una pronunciada pendiente, con cierta dificultad, esta nos sitúa a la misma orilla del embalse, ahora entre alcornoques, algunos eucaliptos, y quejigos transitamos por una senda bellísima que nos envuelve de vegetación, son 5 Km rodeados de una sombra llenas de olores y canto de diversas aves llevándonos al inicio del recorrido.
NOTA: NO ESTÁ PERMITIDO LLEVAR MASCOTAS, INDEPENDIENTEMENTE DE SI ESTAS VAN SUELTAS O ATADAS.